Tras la tragedia ocurrida en la cárcel de Tuluá que dejó 53 muertos y más de 20 heridos, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, alzó la voz para indicar que este tipo de sucesos enciende las alarmas para exigir una reforma al sistema carcelario.
Debido a la situación, el mandatario municipal convocó un consejo de seguridad extraordinario para analizar la crítica situación de hacinamiento en estaciones y cárceles de la ciudad donde hizo una petición al gobierno nacional, la cual no fue bien vista por el ministro de Justicia, Wilson Ruiz.
«Le insistimos al Gobierno nacional que decrete la emergencia carcelaria, hay unos problemas muy graves de hacinamiento, de comportamientos faltos a la legalidad y de realidades dolorosas» dijo Ospina.
A su afirmación le salió al paso el ministro de justicia, quien indicó que el alcalde “siempre está fuera de base y le pidió que se lea varios artículos, donde establecen las competencias que tienen alcaldes y gobernadores sobre el tema carcelario.
«El alcalde siempre está fuera de base, la ley Jorge Iván Ospina debe leer, la ley 65 del 93 y el Plan de Desarrollo que obliga a alcaldes y gobernadores a solucionar la problemática de hacinamiento de sindicados, mientras tanto la Nación lo debe de hacer con los condenados», mencionó.
El alcalde Ospina no se quedó callado y le respondió lo siguiente: “Ahora resulta que el Ministro le quiere trasladar a los alcaldes la horripilante situación vivida en el sistema carcelario que tiene como reciente hecho la muerte de 53 internos en Tuluá . No Ministro, existe una crisis nacional carcelaria y debe asumirla el que está fuera de base es usted”.