Visiblemente disgustado, el alcalde de San Antero, Lormandy Martínez, dijo que elevó consultas a la Superintendencia de Servicios Públicos para que se contemple la posibilidad de no pagar el subsidio que asume el ente territorial para el servicio de agua potable, si la empresa responsable no cumple con la eficiente prestación del servicio en la población.
La consulta, que lleva copia a la Contraloría y Procuraduría, busca además revisar el contrato de concesión, dijo el mandatario al señalar que el Estado no puede estar pagando por servicios que no se prestan y que lo único que provocan son alteraciones de orden público, como se advierten en el municipio y por el cual llama a la calma a sus habitantes.
Esa misma petición se la hizo saber en una mesa de trabajo a los directivos de Aqualia, quienes manifestaron que el servicio está interrumpido por fallas eléctricas en tres puntos del sistema, entre ellos, en la planta de captación en Lorica y la Estación de El Silencio en San Antero.
Cuestiona que ahora cuando se han gestionado a través del Pacto del Golfo de Morrosquillo, 18 mil millones de pesos para la optimización del acueducto urbano de San Antero, hasta el corregimiento El Porvenir, no haya garantías para prestar un mejor servicio para 33 mil habitantes y las áreas turísticas de la región.