La Fiscalía General de la Nación, a través de la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio y el CTI, y en un trabajo articulado con el Ejército Nacional, ocupó 24 bienes que pertenecerían a un clan familiar que estaría involucrado en actividades narcotraficantes y otras conductas delictivas.
Se trata de inmuebles rurales y urbanos, vehículos y un establecimiento de comercio avaluados en cerca de 18.000 millones de pesos que fueron afectados con medidas cautelares de suspensión del poder dispositivo, embargo, secuestro y toma de posesión.
Las diligencias de ocupación se cumplieron en Puerto Guzmán (Putumayo), Cali (Valle del Cauca), Santa Rosa de Cabal (Risaralda), San Vicente del Caguán (Caquetá); y Popayán, El Tambo y Patía en El Bordo (Cauca).
Los activos habrían sido adquiridos con los recursos ilícitos obtenidos por los esposos Jesús Hugo López Díaz, alias Cabezo; y Arelis Galíndez Astaiza.
El material de prueba indica que la pareja, al parecer, puso varios de los bienes a nombre de sus hijos, cuando eran menores de edad. Esa titularidad se mantenía hasta la fecha.
La Sociedad de Activos Especiales (SAE) asumirá la administración de los bienes afectados.