Más de 70 millones de pesos costaron en promedio las labores de las investigadores de la Fiscalía y los agentes de Policía.
La Fiscalía General de la Nación evalúa iniciar una investigación por falsa denuncia contra una mujer de 28 años de edad quien le mintió a las autoridades, al asegurar que había sido víctima de abuso sexual por parte de miembros de la Policía en un CAI de Usme en el sur de Bogotá, en los últimos días en el marco de las manifestaciones.
El caso fue difundido a través de las redes sociales, originando que la Fiscalía desplegara inmediatamente las labores judiciales respectivas para esclarecer los hechos.
Para tratar de validar su denuncia, la mujer se trasladó hasta el Hospital de Kennedy y aseguró que requería atención, porque había sido abusada sexualmente por parte de un grupo de uniformados.
Sin embargo, la Fiscalía priorizó las investigaciones y luego de entrevistar a los uniformados, a los médicos que atendieron a la mujer y hacer una reconstrucción de los hechos con las cámaras de seguridad del sector, fueron detectadas toda una serie de inconsistencias en el relato de la mujer.
De acuerdo con los médicos entrevistados por los investigadores, las heridas que presentaba la mujer eran de meses atrás y no tenían una relación directa con un caso de abuso sexual.
También se estableció con base en las evidencias que la mujer había salido de un establecimiento nocturno de la localidad de Usme y luego se había ido para su casa, pero no se corroboró el supuesto arresto por parte de la Policía o mucho menos el abuso sexual.
Ante las abundantes pruebas recolectadas por la Fiscalía, la mujer decidió confesar a los investigadores que se había ido de rumba sin avisarle a su novio y mintió para justificar el robo de un celular que le habían regalado.