Puerto Libertador, municipio enclavado en el sur del departamento de Córdoba y con más de 36 mil víctimas por el conflicto armado no ofrece oportunidades para educación superior a los jóvenes de la región, pero tienen abiertas las “puertas del mal”.
De esa manera el alcalde de Puerto Libertador, Eder Jhon Soto, le explicó al gobernador de Córdoba, Orlando Benítez y al Defensor Nacional del Pueblo, Carlos Camargo, que están abandonados por el Estado y que se requiere una intervención urgente.
Nuestros jóvenes claman oportunidad de educación. Si nosotros no garantizamos que ellos puedan educarse en universidades, institutos técnicos y tecnológicos, el mal le tiene las puertas abiertas y luego ellos serán nuestros verdugos”, dijo el mandatario.
Recordando que todo tipo de organizaciones armadas ilegales se han y se siguen disputando el territorio, le pidió al defensor del pueblo intervenir para que a los campesinos de la región inmersos en la ilegalidad tengan una oportunidad de mutar a la legalidad.
“Ellos lo han propuesto, lo han pedido, y nadie les da esa oportunidad”, exclamó el alcalde, que fungió como anfitrión en la conmemoración del Día de los Derechos Humanos en Colombia.
El gobernador respondió señalando que en el corto tiempo como mandatario logró la creación del Fondo de Educación Superior y que Puerto Libertador tendrá un espacio importante para subsidiar a los jóvenes de la región.
El defensor del pueblo tomó atenta nota y dijo que desde su labor constitucional servirá de puente para que el Gobierno Nacional atienda esos requerimientos.