Indignación ha generado en la capital de Santander un nuevo ataque del cual fueron víctimas los jugadores del Atlético Bucaramanga y el guardia de seguridad de la sede Barlovento, ubicada en Piedecuesta, en la carrera 14 con calle 33, por parte de un grupo de al menos 25 barras bravas.
Según el relato de algunos de los jugadores, quienes hicieron públicas sus denuncias por medio de redes sociales, los supuestos “hinchas” se declararon en desacuerdo con algunas decisiones que ha adoptado el cuerpo técnico y los resultados en el último torneo, por lo que decidieron irrumpir en esta sede donde se queda el equipo durante la pretemporada.
Una vez burlada la seguridad, los barras bravas agredieron física y verbalmente a los jugadores, algunos de los que terminaron con heridas en sus brazos y piernas, e incluso les hurtaron varias pertenencias de valor.
“Impresentable lo que acaban de hacer unos hinchas desadaptados y delincuentes al meterse a nuestra sede, agredirnos y a robarnos nuestras pertenencias. Creo que los que nos quedamos acá y todos los compañeros que han llegado siempre, queremos lo mejor para la institución y sus fanáticos”, señaló el arquero del equipo Búcaro, Juan Camilo Chaverra.
No es la primera que este tipo de actos de intolerancia ocurren contra los jugadores y las instalaciones del equipo, pues en múltiples oportunidades la sede de Bucaramanga ha sido atacada con piedras, palos e incluso han intentado prenderle fuego./ COLPRENSA