Hoy el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, Dane, presentó los resultados de enero de la Encuesta de Pulso Social, en los que se evidenció que el Indicador de Confianza del Consumidor para ese mes llegó a 35,9 puntos, lo que significó un retroceso frente a la cifra de diciembre (39,3).

Este nivel representa una disminución que dejan al país en niveles similares a los vistos en agosto.

De acuerdo con Juan Daniel Oviedo, director del departamento, esto responde a que los hogares consideran que la situación del país es peor a la vista hace 12 meses. 48% de los hogares respondieron que la situación fue peor.

Esta tendencia se vio en todas las ciudades del país, donde se notó una disminución de la confianza.

Oviedo señaló que el brote inflacionario es una de las razones por las cuales los hogares manifiestan unas expectativas más negativas. En la encuesta, 71,2% de los jefes consideran que los precios va a aumentar mucho en los próximos 12 meses.

Esto impactó el dato de optimismo. De hecho, 24,5% de los hogares manifestaron que la situación del país podría ser mejor en los próximos 12 meses. Esto representa un punto porcentual menos que la vista en diciembre.

La inflación y el empeoramiento en la percepción de la situación del país impactaron a los hogares, de los cuales 64,1% manifiestan tener menos capacidad para adquirir artículos de primer necesidad como ropa, zapatos y alimentos

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