El exfiscal Eduardo Montealegre renunció al equipo de paz de Gustavo Petro asegurando que la forma en la que quiere implementar el sometimiento de las bandas criminales “está condenada al fracaso”.

Montealegre era uno de los integrantes de la delegación que buscaba finiquitar los acercamientos con bandas criminales para conseguir su sometimiento a la justicia, un asunto que ha sido una de las banderas del gobierno entrante para conseguir la “paz total”.

El motivo de la discordia entre el exfiscal y el equipo de Petro es que el primero está en contra del planteamiento de que la Fiscalía dirija esas eventuales negociaciones con los grupos armados.

Esto, bajo el pretexto de que el ente acusador no tiene –a su juicio– la estructura que se necesita para llevar a cabo esa tarea.

Por el contrario, Eduardo Montealegre apunta que debe ser una nueva institución la que asuma esa tarea y no alguna de las que ya han sido creadas en Colombia, como Justicia y Paz o la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

Incluso, el exfiscal dio a conocer su renuncia sentenciando que la iniciativa de sometimiento “está condenada al fracaso”.

Aún así, los intentos de negociación de la administración entrante de Gustavo Petro siguen en marcha.

El nuevo gobierno apuesta por retomar los diálogos de paz con el ELN desde La Habana, Cuba, el mismo donde se llevaron a cabo esos acercamientos entre los momentos finales del Ejecutivo de Juan Manuel Santos y comienzos del de Iván Duque.

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