El general Luis Mauricio Ospina, comandante del Ejército Nacional, sabía desde hace dos meses del plan del Eln, para atentar contra la vida del fiscal Francisco Barbosa, el general (r) Eduardo Zapateiro y a la senadora María Fernanda Cabal.
José Benigno Guzmán Mora es el nombre real de alias ‘El Rolo’, también conocido como ‘Julián’, quien es señalado de ser el guerrillero encargado por el Eln para preparar este plan terrorista. No es la primera vez que la opinión pública conoce de su existencia, y tampoco es un desconocido para las autoridades, que están desde hace tiempo detrás de su pista. De hecho, varios ‘Rolo’ han sido aprehendidos por delitos menores a los que se le endilgan a Guzmán. Se sabe que lleva varios años en las filas del ELN y tiene experiencia en atentados.
Desde hace dos meses entonces, el comandante Luis Mauricio Ospina habría decidido ocultar la información de las amenazas, en vez hacerla pública y sobre todo, darla a conocer a los afectados para tomar las acciones judiciales y de seguridad correspondientes.
Cabe recodar que de acuerdo con la Fiscalía, tres fuentes de información, una de inteligencia militar; otra del CTI- Cuerpo Técnico de Investigación-, y una más suministrada a un funcionario de policía judicial que apoya a la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales en temporalidades distintas habrían confirmado la existencia del plan.
Estas fuentes revelaron que presuntamente cinco altos mandos del ELN se reunieron en Venezuela para realizar capacitaciones a integrantes de ese grupo armado organizado para producir un atentado con francotiradores. Todo esto bajo la coordinación de alias “el Rolo”, cabecilla de un frente urbano del ELN.
”Se trata de una modalidad que hace parte del modus operandi de los ataques armados de ese grupo, según la información probatoria recaudada por la Fiscalía en las distintas investigaciones que se vienen adelantando”, reveló el ente investigador.
Asimismo, se habrían reportado movimientos “sospechosos” financieros de personas cercanas a alias ‘El Rolo’, que sobrepasan los 3 mil millones de pesos. “Flujos de dinero que guardan similitud con el atentado contra la Escuela de Policía General Santander, en enero de 2019″.
Toda esta información ya la tenía el Ejército, sin embargo, fue engavetado. De hecho, la Fiscalía le solicitó al Ejército que le enviara estas prueba sobre el plan del ELN, pero la institución no lo hizo, según dice la Revista Semana.
Cuando la Fiscalía hizo público este plan terrorista, ahora sí el ministro de Defensa, Iván Velásquez, lo convocó a una reunión urgente con la cúpula militar. Se dice que esta reunión fue tensa.
Esto, pues no se sabe la razón por la cual el general Ospina se guardó una información tan delicada que comprometía la vida del fiscal general, la de un excomandante del Ejército y la de una senadora de la oposición.
De hecho, fuentes del Ministerio de Defensa le confirmaron a Semana que, en medio de la reunión, hubo un momento tenso, pues el propio general Ospina trató de desconocer el plan del Eln para atentar contra la vida del fiscal Barbosa, a lo que la vicefiscal Marta Mancera, quien acompañó a Barbosa, lo frenó, ya que fue el propio Ejército, a través de una de sus unidades, que había entregado esta información a la Fiscalía de manera oficial.
Semana se contactó con comandante del Ejército, el general Luis Mauricio Ospina, que aseguró que este próximo lunes él entregará un informe al ministro de Defensa para dar claridad sobre este hecho. Al parecer, esto habría sido para proteger el proceso de paz con el Eln.
“La información la conocimos el martes en la reunión del fiscal, el ministro de Defensa y la cúpula. Allí se dijo que el viernes anterior alguien del Ejército la llevó (la información). Entonces, la Fiscalía expresó tener un trabajo de 30 días atrás. Lo de los 60 días corresponde a información que la UIAF nos entrega a todas las fuerzas desde marzo para hacer extinción de dominio, lo cual cumplimos con funcionarios de la Fiscalía o CTI”, dijo y también agregó que no se enteró de que la Fiscalía pidiera algo por escrito al Ejército.