La Selección Colombia salvó un empate en su debut en el Sudamericano Sub 20. Hoy, en el estadio Pascual Guerrero de Cali, el equipo nacional se tuvo que reponer a un gol en contra y logró igualar 1-1.
Mal arranque
Si la Selección Colombia quiere llegar al Mundial de Indonesia, debe rápido corregir sus errores. Anoche mostró algunos preocupantes, como los espacios que le dio a Paraguay para que lo atacara. Los guaraníes, que propusieron un juego veloz por las bandas, aprovecharon esas falencias del rival y se fueron arriba en el marcador desde temprano, al minuto 7, cuando de penal Allan Steven Wlk venció al portero Luis Marquínez. Después siguieron atacando, pero sin efectividad.
Con la necesidad de empatar, Colombia se dejó llenar de ansiedad y, pese a tomar dominio de la pelota, no tuvo profundidad y le costó llegar a campo contrario; solo tuvo un remate peligroso de Alexis Castillo Manyoma, que se fue desviado, de resto la ‘Tricolor’ tocaba el balón pero no causaba daño. Fue un primer tiempo para el olvido.
Cambio de actitud
Lo visto en el arranque tampoco le gustó el ‘Profe’ Héctor Cárdenas, quien al parecer regañó a sus dirigidos en el entretiempo, ya que en la segunda mitad ingresaron con una actitud diferente: la nómina se mostró más combativa y propositiva. A los dos minutos de la reanudación, Daniel Andrés Luna recibió un gran pase filtrado al área de Miguel Monsalve y marcó el tanto de la igualdad, poniendo a celebrar a los hinchas en el Pascual. Por fin se vieron las sociedades en el ataque y funcionaron los ingresos de Juan Castilla y Monsalve, le dieron la movilidad que necesitaba el equipo.
Después entraron a la cancha Óscar Cortéz, Jorge Cabezas e Isaac Zuleta, y con ellos Colombia fue más dominante y arrinconó a los paraguayos. Generaron llegadas más claras. El portero Ángel González ya era figura con sus atajadas.
Los minutos finales fueron emocionantes porque Colombia lo hizo todo para anotar, pero no le bastó con el esfuerzo. Con este empate el equipo está obligado a vencer mañana a Perú para no quedar en riesgo de quedar eliminado de la fase final.