Explicó que sí tuvo un lío legal con las autoridades del país centroamericano por un asunto migratorio, pero no por que lo hubieran acusado de pertenecer a una pandilla.
Aunque la familia de José Antonio Potes había asegurado en el informativo de televisión Noticas Uno que su pariente fue encarcelado a inicios de año en El Salvador y no podían comunicarse con él, la revista Semana reveló el martes 18 de abril, en exclusiva, un video en el que el colombiano aseguró que estaba en libertad y que no era cierta esa versión de que fue enviado a prisión por, supuestamente, haber sido señalado de pandillero.
“En estos momentos estoy acá en las calles libre”, indicó el joven al inicio de la grabación con la que se desmentiría la versión de su madre y la de su compañera sentimental, que desde el municipio de Ríofrío, en el departamento del Valle del Cauca, aseguraron al mencionado noticiero que lo habían acusado de pertenecer a la Mara 18 colombiana por lo que lo encarcelaron y dejaron incomunicado.
Seguido, explicó que sí tuvo un lío legal con las autoridades del país centroamericano, pero que se trató de un asunto migratorio.
“Fue algún malentendido por algo que estaba en la cárcel por temas de pandillas, pero nunca estuve (por eso), sino por (asuntos) de migración, porque estaba sin permiso de trabajo y estaba laborando, y estuve detenido. Veo que los medios difundieron algo que no era”, reiteró.
Aprovechó la grabación para solicitar apoyo para comenzar una nueva vida en Centroamérica, a donde partió por mejores oportunidades, como aseguraron sus propios familiares.
“Con ganas de empezar un nuevo camino acá en este hermoso país y Dios me da la oportunidad de estar acá y de estar con mi familia. (A ellos los) extraño mucho”, finaliza su versión en el video que reveló Semana.
En Noticias Uno entrevistaron a Eliana Potes Cáez quien sostuvo que las autoridades de El Salvador no le permitían comunicarse con su hijo, a quien encarcelaron porque, al parecer, asumieron que era un pandillero por el tatuaje que tiene en el pectoral izquierdo.
“No me lo dejan ver por ese régimen que hay allá (…) Un solo tatuaje tiene y es en el pecho. Es el nombre de mi mamá, la fecha en que ella nació y (falleció)”, dijo.
Mientras que Claudia Marcela García, la compañera sentimental del joven en Colombia, con la que, además, tuvo un hijo que ahora tiene cuatro años de edad, afirmó que en la última comunicación que tuvo con Potes, él le había dicho que lo detuvieron al ser acusado de pandillero.
“Está capturado porque pertenece a la Mara 18 colombiana, ¿dónde aquí hay (un grupo de esos)?”, cuestionó la mujer en la entrevista.
Por su parte, Semana consultó con la hermana del joven, Karol Potes, quien reiteró que su familiar viajó a El Salvador porque era un fan de su presidente, Nayib Bukele, a quien admiraba por su mano dura contra el crimen organizado, pero también porque tenía un amigo que se había logrado acomodar en ese país.
Como el joven es experto en trabajos de soldadura, el allegado le contó que en ese país esa labor era mejor pagada, así que se fue con la ilusión de encontrar mejores oportunidades: “Quería que mi mamá dejara de trabajar tanto y brindarles un apoyo a ellas”.
Sin embargo, en la revista sostuvo la misma versión de su cuñada, que a José Antonio Potes lo detuvieron por presuntamente pertenecer a la Mara 18.
Finalmente, en Semana reseñaron que la Cancillería de Colombia les indicó que Potes fue privado de la libertad el 21 de enero de este año, en la colonia Las Margaritas del municipio de Soyapango, en la capital salvadoreña, tras un operativo dentro del régimen excepcional.