El modelo de alternancia educativa en la ciudad de Montería está previsto habilitarse inicialmente para los estudiantes de grados 10 y 11.
Sin embargo, en la zona rural no están las condiciones para que las instituciones educativas regresen gradualmente a las clases presenciales en los últimos grados del ciclo de bachillerato.
La rectora de la I.E San Anterito y presidente de la Asociación de Rectores de Montería (ASOREM), Tatiana Negrete, precisó que el deterioro de la infraestructura educativa en Montería es más notorio en la zona rural, donde además deben superarse otros obstáculos como la accesibilidad y el suministro de servicios básicos e indispensables.
“Como está establecido el plan de alternancia, solo regresarían los grados 10 y 11 de las instituciones que cumplieran las condiciones, dejando a las instituciones rurales en un rezago total porque un factor importante para el regreso a clases es el agua potable y un gran número de colegios no contamos con ese recurso. Los rectores hemos fijado posición y es el retorno de todos los grados 10 y 11”, indicó.
El gremio de rectores también se refirió al déficit de aulas y un alto porcentaje de aulas y baterías sanitarias en mal estado en los establecimientos rurales.