Tras la aprobación de la conciliación en la plenaria del Senado, pasó a la sanción del presidente de la República, Iván Duque, la ley que prohíbe el castigo físico como un método de corrección de los niños en el país o ‘Ley antichancleta’.
La norma, indica que las correcciones a los hijos que implique algún método de violencia queda prohibida. En tal sentido la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, sostuvo que “queda prohibido el castigo físico sin ninguna consecuencia para la patria potestad de los padres, pero sí con una gran estrategia que liderarán los padres de familia, quienes son los que deben definir los valores, los principios, las ideologías políticas de sus hijos y que en compañía del Estado orientarán un gran programa de pedagogía para que los padres que quieran educar a sus hijos, prescindiendo del castigo físico y generando disciplina, corrección y límites, puedan hacerlo con ayuda del Estado”.
El autor del proyecto, el representante a la Cámara por el Partido Liberal, Harry González, sostuvo que esta nueva ley lleva a que los padres tengan un límite a la hora de corregir a los niños, lo cual representa un gran paso en un país como Colombia que ha sufrido tanto la violencia.
Para González, “se establece una política pública que va a contribuir a que culturalmente cambia nuestro país y las familias conozcan métodos distintos al castigo físico en los modelos de corrección a los niños. Permanece la facultad de los padres de corregir a los hijos, solo que tienen un límite, no más cachetadas, no más pellizcos, no más coscorrones, no mas latigazos, no más planazos, no más castigo físico”.