Una pena máxima, muy discutida por los jugadores del Barcelona, transformada por Sergio Ramos en el minuto 63 decidió el clásico en el Camp Nou (1-3), donde a los locales les faltó puntería y gasolina en un partido que Luka Modric cerró en el minuto 90.
Tras este resultado, los azulgrana encadenan el tercer partido liguero sin ganar y suma siete puntos, mientras que el Real Madrid se enfila hasta lo más alto de la tabla con trece puntos.