Las autoridades de salud iniciaron una investigación del caso que involucra a una enfermera de la Clínica Montería que al parecer habría sufrido un efecto adverso a la vacuna contra la covid-19.

Se trata de la profesional de la salud, Erika Juliet Miranda Jaramillo, quien el pasado 2 de marzo recibió la aplicación de la vacuna Pfizer, y minutos sintió debilidad y se habría desmayado.

La Secretaría de Salud de Córdoba informó en la mañana de este sábado 06 de marzo que la paciente se encuentra estable, y así como el caso de la auxiliar de enfermería de Sahagún, está sometida a exámenes que permitan conformar o desvirtuar si está asociado a la vacuna.

El secretario de salud de Córdoba, Carlos Andrés Vasco, informó a www.gsnoticias.com que ninguno de los dos casos reportados pueden confirmarse como reacción negativa a la vacuna.

Explicó que se están haciendo todas las valoraciones del caso y contrastadas con el Invima, Instituto Nacional de Salud y el Ministerio para que haya un pronunciamiento científico que determine el origen de la situación.

No hay certeza que haya adversa a la vacuna de Sinovac, como tampoco a la Pfizer, en el caso de las enfermeras reportadas luego de la aplicación del biológico, precisa el funcionario.

Familiares de la enfermera señalaron la paciente sintió mareo, dolor de cabeza y sensación de calor extremo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *