Los hechos se cometieron en el 2014 contra el joven que se desempeñaba como acólito en una iglesia del municipio de Floridablanca.
La Fiscalía General de la Nación anunció que un sacerdote de 41 años de edad fue condenado a nueve años de prisión por el delito agravado de actos sexuales abusivos con un menor de 14 años en concurso homogéneo y sucesivo.
De acuerdo con la investigación adelantada por unfiscal del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas), los abusos se cometieron en noviembre del año 2014 contra un menor de 14 años, quien se desempeñaba como acólito en una iglesia del municipio de Floridablanca, Santander, donde fungía como sacerdote el hoy sentenciado.
De este modo, la Fiscalía estableció que en varias oportunidades el religioso le realizó tocamientos de carácter libidinoso a la víctima y le hizo diferentes propuestas sexuales.
Además, la madre del menor, quien se encontraba preocupada por el cambio de comportamiento de su hijo, se enteró de la situación al revisar su celular y encontrar un mensaje enviado por el sacerdote en donde le hacía una invitación a tener encuentros íntimos.
“La Dirección Seccional de Fiscalías de Santander continúa su defensa por la integridad y formación sexual del joven, y en general, de los niños, niñas y adolescentes como está priorizado en el Direccionamiento Estratégico diseñado por el Señor Fiscal General de la Nación”, aseguró el fiscal encargado del caso.
Por su parte, la defensa del procesado apeló la sentencia de primera instancia ante el Tribunal Superior de Bucaramanga. Sin embargo, fue enviado a la cárcel Modelo de Bucaramanga y será el Tribunal Superior de Bucaramanga quien decidirá si le reduce la pena o ratifica la sentencia de 9 años de prisión.
Asimismo, Monseñor Alí sostuvo que los sacerdotes que se vean implicados en casos de abuso sexual serán separados de la Iglesia y si por petición de la justicia ordinaria deben ir a la cárcel la institución no se opondrá.
“Cualquier denuncia que tengamos, inmediatamente el sacerdote se separa, esto es lo que se llaman las medidas cautelares canónicas y si la justicia ordinaria dice que tiene también que ir a la cárcel, va a la cárcel; en esto tenemos claro que un sacerdote es un ciudadano”, explicó.
Fuente. Infobae