Un nuevo estudio de investigadores de la Universidad de Harvard, señaló que cenar después de las 10 de la noche aumenta el riesgo de desarrollar obesidad.
El artículo publicado en la revista ‘Cell Metabolism’, relacionó el hecho de comer tarde, con una desaceleración del metabolismo en las horas posteriores a la cena, y que esto evidenció un aumento del hambre durante la mañana siguiente.
En el estudio participaron 16 voluntarios con sobrepeso con edades que oscilan entre los 20 y los 60 años, divididos en dos grupos. El primer grupo lo conformaron los que necesitaban hacer su última comida del día a las seis de la tarde y el segundo conjunto lo integraron los que sentían la necesidad de comer después de 10 de la noche. Ambos grupos ingirieron la misma comida ofrecida por los investigadores.
Los investigadores recolectaron datos sobre la temperatura corporal y el gasto de energía; y se hicieron muestras de sangre. Los científicos también controlaron los factores que podrían interferir con el estudio, como el ejercicio, el sueño y la exposición a la luz.
Los resultados mostraron que las personas que ingirieron su última comida a las 10 de la noche quemaron menos calorías al día siguiente y tuvieron una mayor producción de la hormona grelina, asociada al apetito en comparación con las que lo hicieron hasta las seis de la tarde.