La Alcaldía aclaró que hasta el momento no se ha negado la atención médica a ninguna persona.
Aún con la habilitación de mil 30 camas y la promesa de activar 20 más en las próximas horas, Medellín tiene una población fluctuante de por lo menos 300 personas que están a la espera de una cama en la Unidad de Cuidados Intensivos de uno de los centros asistenciales de la ciudad.
Según los datos de la administración local, 190 son habitantes de Medellín y el resto corresponden a otras regiones del departamento.
El alcalde Daniel Quintero explicó que hay pacientes que deben esperar entre 24 y 36 horas para ser ubicados en alguna unidad disponible, pero aclaró que ninguno de ellos ha dejado de recibir atención mientras se desocupan las camas especiales.
Según el mandatario local, “además de las camas de cuidados intensivos tenemos otras zonas donde tenemos ventiladores donde podemos intubar. Por ejemplo las salas de cirugía donde permanecen las personas que necesitan intubación inmediata, mientras esperan a que se desocupen las camas”.
Se estima que cada día salen de estas unidades por lo menos 100 pacientes, pero ese mismo número es el que ingresa. En medio del tercer pico de contagios con Coronavirus, el personal médico intenta controlar el flujo de tal manera que la ocupación esté entre el 97 y el 98%.
El alcalde Quintero manifestó que es posible que a partir de la próxima semana se comiencen a estabilizar los reportes diarios de contagios y de fallecidos en el departamento.
Debido a la alta ocupación en las UCI del departamento que están por encima del 97%, a las dificultades para remitir pacientes a otras regiones del país, y al incremento de fallecimientos, las autoridades de salud de Antioquia decidieron activar el triaje ético que consiste en priorizar a los pacientes que finalmente podrán acceder a una Unidad de Cuidados Intensivos.