Roberto Firmino se vistió este viernes de Neymar para salvar a una selección brasileña gris que sudó más de la cuenta para derrotar en casa a Venezuela, en la tercera jornada de las eliminatorias suramericanas del Mundial de Catar 2022.
El delantero del Liverpool anotó el único tanto del encuentro en el minuto 66 y dio tres puntos sufridos que le permiten a la Canarinha aislarse al frente de la clasificación, con pleno de victorias y dos puntos de ventaja sobre Argentina.
La vigente campeona de América echó demasiado de menos a Neymar, desconvocado a última hora tras no superar a tiempo su lesión en el abductor, y evidenció una falta de creatividad preocupante sin el atacante del París Saint-Germain.
Venezuela apenas se acercó a la portería de Ederson. Estuvo muy blanda en ataque -sólo se salvó Soteldo- y siempre estuvo más preocupada con la muralla defensiva que erigió en el Morumbí y que resistió durante una hora de juego.
La Vinotinto encadenó de esta forma su tercera derrota consecutiva tras caer ante Colombia (3-0) y Paraguay (0-1). En la próxima jornada Brasil se mide con Uruguay, en Montevideo, y Venezuela recibe a Chile.
La Canarinha estuvo muy espesa, lejos de la sobresaliente versión que mostró en las dos primeras jornadas ante Bolivia (5-0) y Perú (2-4). Le faltó uno contra uno, acierto en el pase y movimiento al espacio.
En la primera mitad, la Vinotinto estuvo bien cerrada atrás.
Siguió a la perfección el guión del portugués José Peseiro: solidez defensiva y marcación estrecha. No concedió un milímetro a la todopoderosa Brasil, hoy sin tres de sus mejores hombres: Neymar, Coutinho y Casemiro.
Por un milímetro no subió el primer gol de la pentacampeona del mundo en los primeros compases del partido. Fue lo que se adelantó Lodi para recibir un desplazamiento en largo que acabó en gol de Richarlison tras un mal rechace de Wuilker Faríñez.
El juez de línea levantó la bandera y el VAR le dio la razón. Fuera de juego por un suspiro. Fuera de juego de VAR.
Con esa decisión, la Canarinha se trasladó mentalmente a la fase de grupos de la Copa América de 2019, cuando empató sin goles con Venezuela en un partido en el que VAR jugó un papel fundamental al anular dos goles del combinado verde-amarillo.
Tite no quería ver la misma película de ninguna manera. El seleccionador vociferó desde el área técnica en un intento por alumbrar a los suyos. Se desgañitó.
«¡Ve saliendo, ve saliendo!», gritaba a su centro del campo.
Pero al juego melancólico de Douglas Luiz, Everton Ribeiro y Allan se unió el desacierto de su tridente ofensivo. Flagrante fue el error de Richarlison a puerta vacía.
Centro al segundo palo de Renan Lodi, el mejor de Brasil en la primera mitad; Gabriel Jesus desvía de primeras al corazón del área y Richarlison, inexplicablemente, se lanza en una especie de remate karateca que se marchó desviado.
A Peseiro le salía todo según lo planeado: Brasil empezaba a desquiciarse y Venezuela empezaba a crear peligro a la contra.
Solo le hizo falta una a Soteldo para demostrar su talento. El atacante del Santos se fue fácil de Danilo y puso un centro raso peligrosísimo que Marquinhos desvió a córner. También avisó Machís desde fuera del área, pero Ederson paró con seguridad.
Cuando el árbitro pitó el descanso, la cara de Tite denotaba un enfado monumental. El técnico no esperó y movió el banquillo antes de comenzar el segundo tiempo. Dio entrada al mediapunta Lucas Paquetá en lugar del pivote Douglas Luiz.
Vinicius Júnior, por el momento, no era la alternativa.
Tite también cambió la posición de Firmino, más centrado. Esa modificación fue vital para el resultado final. Brasil mejoró, aunque abusó demasiado de los centros aéreos desde la banda.
En uno de ellos, el árbitro, con la ayuda del VAR, descartó un penalti por mano de un defensor visitante, pero otro de esos centros bombeados acabó en gol.
El encargado de desatascar a Brasil fue Firmino, que cazó en el área un rechace, tras centro desde la derecha de Everton Ribeiro. Tite vibraba con rabia.
Tercer gol en las eliminatorias para el delantero del Liverpool y a la postre el gol de la victoria. Poco más hizo Brasil. Venezuela lo intentó en una falta directa de Otero y una arrancada de Savarino en los minutos finales, pero el marcador no cambió.