Mientras la empresa Aqualia se escuda en constantes excusas para no prestar un eficiente servicio de agua potable en el municipio de San Antero, las comunidades volvieron a protestar.
En esta oportunidad, habitantes de la zona rural se lanzaron durante el pasado fin de semana y puente festivo a la carretera troncal que conecta al departamento de Córdoba, con los balnearios del Golfo de Morrosquillo y generaron un trancón por más de dos horas.
La cuestionada empresa evade su responsabilidad señalando que el río Sinú bajó su caudal y no tiene como soportar el suministro de agua potable.
Mientras tanto, el alcalde de San Antero, Lormandy Martínez, envía carro tanques de agua potable, que se vuelven insuficientes para atender la demanda, pero no toma decisiones de fondo que resuelva integralmente el problema.
Las comunidades cuestionan al alcalde municipal porque el problema con caudal y sin caudal del río Sinú, la empresa Aqualia no ha podido prestar un buen servicio.
“Le ha quedado grande a esa empresa la prestación del servicio, así como el alcalde le ha quedado grande enfrentar el problema y tomar decisiones que garantice un servicio vital”, expresaron quienes se manifestaron en las vías.