En el nacimiento del río Sinú está lloviendo sin piedad. Las crecientes son frecuentes y sino existiera la presa de Urrá, hace semanas todos los municipios ribereños estuviesen con inundaciones catastróficas. Pero a pesar de la intervención de la central hidroeléctrica, los niveles seguirán aumentando y las emergencias no podrán ser contenidas.
Los aportes actuales que recibe el embalse se han incrementado notablemente en los últimos días, siendo el pasado miércoles 18 de agosto de 1074,93 m³/s (metros cúbicos por segundo) y ello impide a la hidroeléctrica reducir la generación de energía, es decir, se trabaja a toda maquina con las cuatro turbinas para utilizar y evacuar más agua atrapada antes que pueda llegar picos de descontrol.
A través de un comunicado, la empresa informó que, “las descargas al río Sinú no superan los 664 m³/s, caudal que en principio no provoca situaciones de riesgo aguas abajo, pero las condiciones se han complicado estos días porque aguas abajo de URRÁ las fuertes lluvias han provocado que los aportes adicionales de caudal lleguen a valores de 236 m³/s aproximadamente, lo que se evidencia con el caudal que el día de hoy transita por Montería, 900 m³/s aproximadamente”.
Es decir, los aportes adicionales no pueden ser controlados por la hidroeléctrica, así como tampoco los aportes de las cuencas propias de ciénagas, arroyos y zonas bajas en general.
“Debido a lo anterior, se hace necesario que las poblaciones localizadas a orillas del Sinú y quienes hacen uso de las aguas para diferentes fines, tomen las precauciones pertinentes dado el incremento en los niveles del río”, precisa el documento técnico.