Montería, 8 de octubre de 2025. Con la satisfacción del deber cumplido y con la esperanza y compromiso de seguir salvando vidas, el alcalde Hugo Kerguelén García, clausuró el proceso transformador de capacitación en seguridad vial que ha dado vida a «Ruedas de Conciencia», un grupo de 24 motociclistas que decidieron cambiar sus hábitos de movilidad para convertirse en verdaderos guardianes de las vías monterianas.
Este hito no es solo un cierre, sino el comienzo de un movimiento que busca salvar vidas y construir un futuro más seguro para todos.
Durante el acto, el mandatario junto a la secretaria de Tránsito, María Fernanda López, y miembros de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Metropolitana, entregó certificados, buzos y elementos de prevención vial a los nuevos promotores de seguridad al volante sobre dos ruedas.
«Cada uno de estos motociclistas, con su dedicación y esfuerzo, se ha convertido en un faro de cambio, dispuesto a llevar un mensaje de responsabilidad y respeto por las normas de tránsito a cada rincón de la ciudad. «Ruedas de Conciencia» no es solo un nombre; es un símbolo de compromiso, un grito colectivo por una movilidad consciente que inspire a otros a seguir su ejemplo», dijo el mandatario monteriano durante su intervención.
Así mismo, enfatizó que: «Hoy celebramos no solo su transformación, sino su valentía para ser la voz que nuestra ciudad necesita. Cumplir las normas de tránsito es más que una obligación; es un acto de amor por la vida, por nuestras familias y por nuestra comunidad. Ustedes, queridos motociclistas, son el alma de esta misión, y su trabajo es la chispa que encenderá un cambio profundo en nuestras vías. Para nosotros, la seguridad vial no es solo una prioridad, es un compromiso con el corazón de nuestra ciudad».
Con Ruedas de Conciencia, la ciudad da un paso firme hacia una movilidad más humana y responsable. Estos 24 héroes de las vías, con su ejemplo, recuerdan que cada acción cuenta y que unidos y cumpliendo las normas de tránsito, todos los motociclistas pueden llegar a casa sanos y salvos.