En el Consejo Nacional Electoral se encuentra atorado el proceso de revocatoria del mandato de la alcaldesa de San Carlos, Córdoba, Leda López, impulsado por un colectivo ciudadano no conforme con su administración y que insiste en que no cumplió con su programa de gobierno.

El desgastante proceso que superó todas las etapas y que quedó a la espera del certificado sobre los estados financieros del comité de revocatoria que debe expedir el Consejo Nacional Electoral, CNE.

Ante la demora, Teodoro Ibáñez, vocero del comité de revocatoria, presentó el 5 de abril una tutela ante el Tribunal Superior de Bogotá y que fue fallada a su favor. Allí le ordenaron al CNE remitir a la Registraduría los documentos requeridos para proseguir el proceso, pero a la fecha no ha sido posible.

Ante ello, Ibáñez Prada, presentó un incidente de desacato y desde el despacho del Tribunal se ha conminado infructuosamente en tres oportunidades al CNE.

Al parecer, la demora en el cumplimiento se ha debido a que, para expedir el documento requerido por la Registraduría, se necesita previamente la autorización de la sala plena de dicho organismo, la cual la semana pasada tuvo la correspondiente sesión para definir lo pertinente.

Actualmente la sala penal del tribunal está a la espera de la respuesta para establecer si debe proseguirse con la apertura del incidente de desacato.

El tiempo pasa, la alcaldesa sigue gobernando y le queda año y medio de gobierno.

Muchos seguidores locales del proceso le perdieron la fe a un proceso que ha cumplido legalmente sus etapas, pero curiosamente en la autoridad nacional que debe dar ejemplo de agilidad, está en desarrollo de lo que muchos líderes en San Carlos consideran ‘una operación tortuga’.

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