El Centro de Investigación económica y social, Fedesarrollo, manifestó que las actuales restricciones que se presentan en el país, por cuenta del segundo pico de contagios de la Covid-19, podrían generar un costo económico entre 8,3 y 12,5 billones de pesos.
El impacto se presenta en dos panoramas: en el primero, donde se contempla un retorno en febrero a nivel de actividad observado en diciembre, el costo ascendería a los 8,3 billones de pesos, que representan el 0,8 % del Producto Interno Bruto (PIB).
El segundo panorama, con un retorno gradual hasta marzo, implica un costo económico de 12,5 billones de pesos, que representaría el 1,2% del PIB, siendo los sectores de Comercio, Industria y actividades inmobiliarias los más afectados.
Precisamente, este sector representaría en el primer escenario un costo económico de 3,0 billones de pesos y 4,5 billones en el segundo escenario; mientras que la industria manufacturera tendría un impacto de 1,0 billones y 1,5 billones, respectivamente.
Por su parte, el mercado laboral también se vería afectado, con un aumento entre 0,6 puntos porcentuales en la tasa de desempleo para el primer escenario, y 0,9 puntos porcentuales para el segundo, que representa entre 146.000 y 220.000 desempleados.
Por departamento, los mayores costos económicos se presentarán en Bogotá, Antioquia y Valle, que tendrían una participación en la reducción de la actividad económica nacional del 48,8 %, 15,9 % y 11 %, respectivamente.
En la capital del país, el primer escenario estaría por el orden del 4,1 billones de pesos, y en el segundo sería de 6,1 billones de pesos; en Antioquia sería de 1,3 y 2,0 billones de pesos; mientras que en el Valle alcanzaría el 0,9 y 1,4 billones de pesos, respectivamente.
Esta participación estimada se encuentra por encima del aporte de estos departamentos al PIB nacional, especialmente en el caso de Bogotá, que con un 26% de participación en el PIB aporta prácticamente la mitad del costo total estimado.
Fedesarrollo explicó que esta nueva estimación es inferior al estudio realizado en abril del año pasado, donde se estimaba que el costo por mes de cuarentena estricta se encontraba en un rango entre 48 a 65 billones de pesos, debido a que las medidas son menos restrictivas que en ese primer momento.
“Esto se debe a la implementación de medidas menos restrictivas a las observadas entre marzo y abril del 2020, a la no aplicación de las medidas de forma general en el territorio nacional, y a la adaptación de las empresas y los trabajadores al nuevo contexto relacionado con la pandemia”, señaló el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía.
Agregó que “el costo final dependerá de eventuales restricciones adicionales a las tomadas hasta la fecha, de acuerdo con la evolución de la ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos y de la rapidez con que los flujos de actividad productiva retornen a las condiciones previas”.
Por ello, desde Fedesarrollo señalan que es fundamental el fortalecimiento del testeo, rastreo y control de los casos con el fin de construir cercos epidemiológicos focalizados, especialmente, en las personas con mayores comorbilidades.
“Fedesarrollo considera además que las decisiones orientadas a controlar y mitigar el contagio del virus deben estar acompañadas de medidas complementarias para apoyar al aparato productivo, especialmente en los sectores más afectados”, concluyó.