Liyela Nathzabary Malaver Agudelo, una mujer de 32 años y con siete meses de embarazo, fue asesinada a sangre fría en el municipio de Soacha mientras cubría por unos minutos el turno de una amiga en su puesto de venta de tintos. La víctima no era el objetivo del ataque, según versiones de testigos.
El hecho ocurrió en una zona frecuentada por trabajadores informales, donde Liyela se ganaba la vida diariamente para sostener a su hijo de seis años. La joven esperaba una niña y se encontraba en una etapa avanzada de gestación, lo que ha causado profunda conmoción entre la comunidad.
Según informaron testigos, un hombre armado se acercó al punto de venta y sin mediar palabra le disparó en la cabeza. Todo indica que el ataque estaba dirigido a otra persona y que Liyela fue asesinada por error, en medio de una presunta red de extorsiones que afecta a vendedores y conductores informales de la zona.
Este crimen ocurrió pocos días después de que la Alcaldía de Soacha anunciara la desarticulación de una estructura criminal dedicada a extorsionar al gremio del transporte informal. Sin embargo, el hecho ha generado preocupación por la continuidad de estas estructuras delincuenciales y la inseguridad persistente en el municipio.
Hasta el momento, la administración municipal ha solicitado a la Fiscalía investigar el caso, aunque no ha emitido un pronunciamiento de fondo sobre esta tragedia que deja una familia enlutada y a un niño huérfano.