El presidente del Consejo de Estado, Luis Alberto Álvarez Parra, se pronunció enérgicamente sobre la toma del Palacio de Justicia de 1985, reiterando la responsabilidad del M-19 en el acto y condenando cualquier intento de justificar o glorificar la tragedia.
Álvarez Parra fue enfático al señalar que es fundamental mantener viva la memoria de las víctimas y no distorsionar los hechos históricos.
“Por eso es inaceptable que se exalte el heroísmo de este hecho doloroso porque eso ofende a las víctimas y humilla la memoria de nuestros muertos”, declaró el magistrado.
Su declaración subraya la postura institucional de que la acción guerrillera constituyó un hecho violento que atentó directamente contra la institucionalidad y que causó la muerte de un centenar de colombianos, un evento que la justicia y la sociedad deben recordar con respeto hacia las víctimas.
Su declaración se dio en el marco de la conmemoración de los 40 años del Holocausto del Palacio de Justicia.
