Petro declara la emergencia
económica y social en Colombia tras el rechazo del Congreso a su reforma tributaria clave para las cuentas de 2025 y 2026.
El Gobierno de Colombia ha proclamado este lunes la “emergencia económica y social” durante un plazo de 30 días, después de que el Congreso rechazara a comienzos de diciembre la reforma tributaria con la que el Ejecutivo aspiraba a ingresar 16.300 millones de pesos (unos 3.700 millones de euros) para cerrar la financiación del presupuesto de 2026.
El presidente, Gustavo Petro, ha suscrito un decreto de alcance nacional que le faculta para fijar nuevos tributos, amparándose en la “incapacidad material y jurídica de garantizar, de manera continua, oportuna y suficiente, el goce efectivo de algunos derechos fundamentales y la prestación de unos servicios públicos esenciales”.
Según ha expuesto el propio mandatario, esta coyuntura ha derivado en una “situación fiscal que adquirió el carácter de grave” tras el rechazo, el pasado 9 de diciembre, de la reforma con la que el Ejecutivo preveía recaudar 12.000 millones de pesos (alrededor de 2.700 millones de euros) “para la vigencia fiscal del años 2025”.
El Ejecutivo colombiano ha detallado además que la decisión está motivada por varios factores: la obligación de cumplir el auto del Tribunal Constitucional relativo a la Unidad de Captación de Salud (UPC, el importe que el Estado abona a las Empresas Promotoras de Salud, EPS, por cada asegurado para sufragar su atención sanitaria); la urgencia de reforzar la seguridad ciudadana ante alteraciones del orden público; la necesidad de atender pagos pendientes heredados del anterior gobierno, y las limitaciones al endeudamiento asociadas a las “medidas unilaterales de Estados Unidos”.
El anuncio de Petro se produce mientras se aguarda la emisión de nuevos tributos en los próximos días, que podrían contemplar un impuesto al patrimonio para personas jurídicas, un incremento del IVA y de los gravámenes al consumo, así como nuevas cargas sobre las bebidas alcohólicas, el tabaco, determinados alimentos ultraprocesados y la explotación de combustibles fósiles, de acuerdo con la información difundida por Caracol Radio y el diario ‘El Espectador’.