Con profunda tristeza y preocupación, el gobernador del departamento de Córdoba, Erasmo Zuleta, se pronunció este jueves ante los recientes hechos violentos que han cobrado la vida de miembros de la Fuerza Pública en la región.
“¡Duele el alma!”, expresó Zuleta al confirmar el asesinato del joven patrullero Aldair Urango en el corregimiento Las Palmitas, municipio de Ciénaga de Oro, y del soldado José Espitia en el municipio de Chimá.
Estos ataques se suman al atentado ocurrido el día anterior contra un policía en Lorica.
Según el mandatario, los hechos estarían relacionados con un posible plan pistola activado por el Clan del Golfo. Aunque la información aún no ha sido confirmada oficialmente, Zuleta aseguró que “con estos hechos, se puede confirmar” la existencia de dicho plan criminal.
Frente a la situación, el gobernador anunció una recompensa para quienes suministren información que permita identificar y capturar a los responsables. Además, señaló que en la cumbre de gobernadores que se llevará a cabo mañana en Yopal, Casanare, expondrá la crítica situación de orden público ante el Presidente de la República, el Ministro de Defensa y la cúpula de la Fuerza Pública.
“Esto no puede seguir. Los bandidos están asesinando a nuestra gente y a nuestros héroes de la patria”, advirtió Zuleta, quien también convocó a un consejo de seguridad extraordinario para coordinar medidas urgentes con la fuerza pública, con el objetivo de proteger tanto a los uniformados como a la ciudadanía en general.
El mandatario concluyó enviando un mensaje de solidaridad a las familias de las víctimas y a todos los miembros de la Fuerza Pública: “Mi abrazo solidario a su familia, y a todos los hombres y mujeres que visten el uniforme con honor”.