Óscar Robayo, presidente de la Unión de Trabajadores Penitenciarios (UTP), se pronunció sobre los hechos recientes de fugas y “paseos” por parte de reclusos en algunas cárceles del país.

Robayo durante una entrevista precisó que la mayoría de los funcionarios del Inpec mantienen un sistema carcelario sin recursos, debido a la inoperancia por parte del Estado.

El funcionario precisó que la mayoría de las cárceles no cuentan con cámaras de seguridad, el equipo de comunicación es casi nulo, y aunado a eso los escases de personal.

Acotó que la mayoría de los guardias del Inpec laboran 25 horas corridas, debido a la falta de personal que han reportado, pero que no han tomado cartas en el asunto.

El presidente de la UTP insistió en la necesidad de hacer una reforma estructural para que estos problemas puedan superarse.

El Gobierno nacional está escudándose en nosotros los guardianes. Aquí hay una respuesta administrativa negligente”, afirmó el vocero.

Asimismo, Robayo precisó que no se puede juzgar una institución por la conducta de algunos funcionarios que están cometiendo errores. “No tenemos la culpa de las fugas, no nos pueden satanizar”, sostuvo.

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