Alimentos y bebidas no alcohólicas, los sectores que más jalonaron la inflación. 

El Departamento Nacional de Estadísticas (Dane) reveló que en enero pasado, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue de 0,41 %, levemente por debajo del 0,42% registrado en igual mes de 2020.

Mientras tanto, la inflación anual fue de 1,60 %, frente al 3,62 % registrado en el mismo periodo del 2020.

La división que más contribuyó en el costo de vida de los colombianos fue alimentos y bebidas no alcohólicas, con 0,23 puntos porcentuales.

Este rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas presentó una variación mensual del IPC en enero de 1,44 %. Recreación y cultura presentó una variación mensual de -0,82 %.

Por ciudades, Ibagué presentó la mayor variación del IPC con 0,83 % en enero pasado, mientras que Santa Marta tuvo la menor variación del IPC con 0,05 %.

El informe de la entidad detalló que la brecha entre la inflación de los hogares que se encuentran en situación de pobreza (2.3 %)  y altos ingresos  (1,01 %) ingresos se amplió.

SEGUIRÁ A LA BAJA

Por su parte, en el más reciente informe de Política Monetaria presentado por el Banco de la República, el Emisor revisó a la baja su pronóstico de inflación de 2.7 % a 2,3 % para este año.

De acuerdo con el gerente técnico de esa entidad, Hernando Vargas, hay una incertidumbre sobre el efecto que puedan tener las restricciones en el índice de precios al consumidor.

 “Terminamos el 2020 con una inflación por debajo del rango meta, tenemos una alta incertidumbre sobre el efecto que puedan tener las restricciones y cuarentenas sobre el comportamiento de los precios este año”, dijo.

Según el Emisor, aunque parte de la caída de la inflación total sería transitoria y debería revertirse en el segundo trimestre de 2021, varios factores de precios se han acentuado y continuarían vigentes.

Para algunos expertos los bajos precios pueden servir para proteger la capacidad de compra de los consumidores y generar mejores condiciones para los presupuestos de las familias y las empresas.

 “Las sorpresas a la baja nos sugieren la existencia de grandes excesos de capacidad en la economía, por lo que estimamos una brecha del PIB de 6.6% para el año 2020”, señaló el Banco de la República.

El informe también destacó que en la reforma fiscal que necesita el país, se podrá determinar cuál será la senda de crecimiento del país.

“La reforma fiscal es importante para determinar cuál sería la senda de la actividad económica de ahora en adelante, qué tipos de gastos se recortan y qué tipos de impuestos se suben es importante”, aseguró Vargas.

En las proyecciones del Banco de la República no se contempla un tercer pico de la pandemia, ni nuevas restricciones. Sin embargo, se prevé que el comportamiento de la economía durante enero y febrero, será similar al registrado durante agosto, cuando hubo cierres parciales y no generalizados. /Colprensa

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