Génesis Angulo García denunció públicamente la muerte violenta de su gata Alana, ocurrida en Montería, tras un acto de crueldad animal que ha generado rechazo en redes sociales y entre defensores de derechos animales.

Según su testimonio, un hombre atacó a la mascota con una varilla, le causó graves heridas, incluyendo la pérdida de un ojo, y finalmente le provocó la muerte. El agresor habría argumentado problemas de salud mental, pero la joven rechazó esa justificación y exigió que el caso no quede en la impunidad.

Alana era más que una mascota: representaba un vínculo emocional importante para Génesis, especialmente luego del fallecimiento de su abuela. La joven ha expresado su indignación por quienes han intentado minimizar lo ocurrido y ha solicitado a la Fiscalía General de la Nación que actúe con celeridad y responsabilidad en la investigación.

Actualmente, Angulo García recibe acompañamiento psicológico por parte de autoridades locales y de la universidad donde estudia. El caso ha reabierto el debate sobre la necesidad de fortalecer los mecanismos de protección animal y garantizar sanciones efectivas para quienes incurren en actos de violencia contra seres sintientes.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *