Karen y Tatiana Guillín, de 18 y 20 años, fueron obligadas a bajar de un bus y ejecutadas a tiros en un crimen que estremece a Colombia.
El sábado, el municipio de El Tarra, en la conflictiva región del Catatumbo, fue escenario de un crimen brutal que ha generado indignación nacional.
Las hermanas Karen y Tatiana Guillín, de 18 y 20 años, fueron asesinadas junto con la pareja sentimental de una de ellas, mientras viajaban con sus hijos de 3 y 2 años.
Los hechos ocurrieron en plena vía cuando hombres armados, que testigos identifican como presuntos miembros del Eln, detuvieron el autobús en el que se desplazaban y obligaron a las víctimas a descender. Horas después, sus cuerpos fueron hallados en la zona rural de Campo tres, en el municipio de Tibú.
Víctimas inocentes en medio del conflicto
Según versiones preliminares, las hermanas no tenían vínculos con grupos criminales ni antecedentes. Eran conocidos en redes sociales por subir videos a TikTok, lo que hace aún más desconcertante su asesinato.
En el momento del ataque, suplicaron por sus vidas mientras sostenían a sus hijos, quienes presenciaron el horror.
La situación de los pequeños Liam y Thalía, hijos de las hermanas, aún está envuelta en incertidumbre. Algunos informes indican que los criminales los dejaron a su suerte en la carretera tras el asesinato.
Otros reportes señalan que fueron entregados a personas del lugar para su protección, aunque esta versión no ha sido confirmada oficialmente.
El Catatumbo: violencia que no da tregua
En redes sociales, la reacción no se hizo esperar. “Duele tener que ponerle nombre y rostro a la tragedia. Duele imaginar el dolor de sus familias y el futuro de esos niños marcados por una violencia que nunca debió alcanzarlos”, escribió un internauta, reflejando el sentimiento de impotencia que embargo a muchos.
Este crimen se suma a una larga lista de hechos sangrientos en El Catatumbos, una región golpeada por el conflicto armado, donde la vida cotidiana se desarrolla en medio del miedo y la impunidad
Aunque las autoridades aún no confirman la autoría, la presencia de grupos armados ilegales como el Eln y disidencias de las Farc en la zona mantiene en alerta a las comunidades.
*Con información de El Universal
