Al parecer no han servido ni las estrategias, ni el aumento del pie de fuerza para controlar la crítica situación de inseguridad que se vive en Barranquilla, al tanto que los conductores de la empresa de transporte público Sobusa dicen sentirse como carne de cañón, luego de ser víctimas de atentados a bala en menos de una semana por presuntos miembros de la banda los ‘Rastrojos o Costeños’, quienes estarían cobrando extorsiones a la empresa transportadora.

Según los conductores los amenazan con panfleto, incluso, otras dos rutas de buses urbanos de la ciudad también estarían viviendo la misma situación de inseguridad.

Se conoció que al menos 20 conductores han manifestado su deseo de renunciar ante el temor que sienten por sus vidas. Pedimos a las autoridades que arreglen esta situación indican los afectados.

Por su parte el comandante de la Policía Metropolitana indicó que las autoridades ofrecen hasta 10 millones de pesos por los delincuentes que están sembrando el terror en este gremio.

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