En una nueva aparición pública, la excongresista Aida Merlano Rebolledo participó este jueves en una audiencia preparatoria ante el Juzgado 18 Penal del Circuito de Bogotá, donde la Fiscalía General de la Nación presentó el preacuerdo alcanzado con ella por el delito de fuga de presos.
El caso vuelve a cobrar relevancia seis años después de la escapatoria cinematográfica que protagonizó Merlano el 1.º de octubre de 2019, cuando aprovechó una cita odontológica en el norte de Bogotá para huir desde un tercer piso utilizando una cuerda, con la ayuda de varias personas.
Durante la diligencia judicial, Merlano tomó la palabra entre lágrimas para expresar su sentir. Dijo que en la guarnición militar donde permanece recluida se siente en paz y que no se arrepiente de haber escapado, sino de los errores que la llevaron a prisión.
“Me siento tranquila donde estoy. No me arrepiento de haberme fugado, me arrepiento de los delitos que cometí y que me llevaron a estar privada de la libertad”, manifestó la excongresista visiblemente conmovida.
La Procuraduría respaldó el preacuerdo suscrito con la Fiscalía al considerar que cumple los requisitos legales. La jueza, por su parte, programó para el próximo 5 de diciembre la audiencia en la que se definirá si el acuerdo recibe aprobación judicial.
Según el expediente, Merlano contó con el apoyo de terceros —incluidos funcionarios del Inpec y particulares—, quienes facilitaron los elementos para su fuga, entre ellos una cuerda y unos guantes.
La excongresista, condenada originalmente por compra de votos y corrupción electoral, enfrenta ahora la etapa final de un proceso que podría cerrar uno de los capítulos más mediáticos de la política colombiana en los últimos años.