Quienes invaden un predio detrás del barrio Cantaclaro en Montería, expresan que pacíficamente quieren llegar a entendimientos con el gobierno local, pero también dejar sentada la necesidad de tener vivienda digna y propia.
Con esas palabras, Mónica Molina Pérez, le pidió al alcalde, Carlos Ordosgoitia, que propicie una mesa de trabajo en el sitio para exponer su situación y las de cientos de familias pobres que buscan solucionar su problema habitacional.
“Tenemos ocho días de haber iniciado esta invasión porque no tenemos como sostener un arriendo. Esperamos que el alcalde venga y nos ayude a solucionar este problema”, expresó.
Reconocen que es una zona inundable, pero dicen estar dispuestos a levantar el nivel de lo que proyectan como nueva urbanización.
Al cierre de este escrito, la administración municipal, oficialmente no se ha pronunciado.