Con el paso de las horas se han conocido nuevos detalles sobre la entrega de Anderson Vargas Sun, alias Kevin, cabecilla de la estructura Carlos Patiño en el Cauca, perteneciente a las disidencias de las Farc de alias Iván Mordisco.
Fuentes de inteligencia militar confirmaron que la presión de la operación Perseo, adelantada por la Tercera División del Ejército, fue determinante para que este jefe guerrillero se viera obligado a abandonar la ilegalidad.
“Las divisiones dentro de la disidencia de Mordisco se dieron por la caída de un depósito fuerte de explosivos y armas que realizamos desde las Fuerzas Militares. El máximo líder se molestó demasiado y amenazó con asesinar a todos porque sabía que la información se estaba filtrando”, indicó una fuente consultada.
De acuerdo con la información, alias Kevin se encontraba acorralado, sin confianza entre los cabecillas, debido a los duros golpes propinados por las Fuerzas Militares y a la presencia cercana de las fuerzas especiales. Fue un agente infiltrado en la organización quien logró persuadirlo para que se entregara.
“Ellos ya no andan en campamentos como lo hacían antes, sino que viven en casas, donde guardan armas y otros elementos. Desde inteligencia sabemos cómo se mueven y cómo funcionan, lo que nos ha servido en las operaciones”, agregó la fuente militar.
Previo a la entrega, se conoció que se llevó a cabo una reunión en un bar de El Bordo, Cauca, donde se pactaron los detalles de seguridad y el punto de encuentro. Allí, tras la mediación de un infiltrado del Ejército, Vargas Sun se presentó ante las autoridades.
Alias Kevin fue trasladado inicialmente a Cali y actualmente se encuentra en Bogotá, colaborando con la justicia. Su paradero se mantiene en reserva por motivos de seguridad.