Muchas son las quejas que han elevado las comunidades de los municipios de Los Córdobas, Canalete y Puerto Escondido, a raíz de las fallas que registra el Acueducto Regional Costanero que todavía no garantiza en su totalidad el acceso al agua potable.
Uno de estos reclamos obedece a las bajas presiones que registra el suministro del preciado líquido. Ante ello, el equipo periodístico de GS Noticias pudo conocer que esta anomalía se debe a 16 conexiones fraudulentas identificadas recientemente.
Se trata de 16 fincas ubicadas en sectores rurales como Santa Lucía, Los Cedros, Aguas Vivas, El Pantano, El Tigre y La Balastrera, las que se abastecen del servicio que está ideado para las comunidades de los municipios antes mencionados.
Es este sentido, se estima que entre un 30 y 40% del agua que es bombeada y conduce a poblaciones rurales de Montería, está quedando en manos de finqueros de forma irregular.
Como se recordará, en su momento el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez Mora, pidió a las secretarías de Infraestructura y Planeación de Montería trabajar de forma conjunta en el desarrollo del Plan Departamental de Aguas. El objetivo era aprovechar la capacidad del acueducto costanero y con ello, llevar el servicio a las poblaciones rurales que están ubicadas en la margen izquierda de la capital cordobesa.
Para ese entonces, diciembre de 2021, el mandatario departamental aseguró que debido al recambio de tuberías al que sería sometido el proyecto, las obras podían aprovecharse para dejar conectadas a las poblaciones cercanas.
Sin embargo, las 16 conexiones fraudulentas identificadas terminan por restar presión al bombeo de agua, afectado a las comunidades beneficiarias del proyecto, al generar una prestación del servicio deficiente.
Recambio de tuberías
Este fue otro factor que comprometió el desarrollo del proyecto, puesto que las comunidades expresaron que el agua que llegaba a sus hogares presentaba residuos de óxido.
En su momento el Consorcio Soluciones Hidráulicas, responsable del proyecto, señaló que el contrato no contempló el revestimiento interno de la tubería y que la necesidad de hacerlo fue presentada ante el Ministerio de Vivienda y la Gobernación de Córdoba.
Por su parte, Aguas de Córdoba, precisó que el contratista “nunca advirtió que la tubería instalada no contaba con revestimiento interno”.
Finalmente, y tras un proceso sancionatorio por incumplimiento, se logró que el contratista asumiera el recambio de las tuberías que fueron instaladas en los últimos 20 kilómetros de red.
Lo cierto es que, a la fecha, la obra que fue contratada desde el año 2014, suma recursos que superan los 90 mil millones de pesos.