El presidente venezolano aunque habría intentado negociar fue rechazado. Esto se dijeron los mandatarios.
Nicolás Maduro recibió uno de los mensajes más severos y directos provenientes de Washington. Según reveló la agencia Reuters, el presidente estadounidense Donald Trump le dio un ultimátum claro durante una llamada privada: debía abandonar Venezuela en el plazo de una semana si quería recibir un salvoconducto para él y su familia. La conversación, que duró menos de 15 minutos, tuvo un tono categórico y dejó a Maduro sin margen para negociar.
El ultimátum expiró el viernes. Y, de acuerdo con Reuters, fue precisamente ese incumplimiento lo que llevó a que Trump anunciara el sábado el cierre del espacio aéreo venezolano, una medida que simboliza un endurecimiento notable en su postura frente al régimen chavista.
Reuters, que consultó a cuatro fuentes con conocimiento directo de la conversación, describió la llamada como un intercambio dominado por la presión y la falta de flexibilidad. Trump no abrió la puerta a negociaciones paralelas ni a mediaciones diplomáticas. Insistió en un solo punto: la salida inmediata de Maduro del poder y del país.
¿Qué le propuso Nicolás Maduro a Donald Trump?
Maduro, según el reporte, intentó imponer condiciones que Washington rechazó. Solicitó una amnistía legal completa para él y sus familiares, así como el levantamiento de todas las sanciones impuestas por Estados Unidos.
También pidió que se detuvieran los procesos judiciales en su contra, incluido el caso que avanza ante la Corte Penal Internacional. Adicionalmente, planteó que se eliminaran las sanciones aplicadas a más de cien funcionarios venezolanos, muchos de ellos acusados de violaciones de derechos humanos, corrupción o narcotráfico. Ninguna de estas pretensiones fue aceptada.
La agencia británica también reportó que Maduro no estaba dispuesto a entregar el poder de inmediato al presidente electo Edmundo González. En vez de ello, planteó que la vicepresidenta Delcy Rodríguez asumiera un gobierno interino encargado de organizar nuevas elecciones, una propuesta que fue rechazada por Washington, que exigía una transición directa y sin escalas.
El líder chavista también insistió en conservar el control sobre las fuerzas armadas durante cualquier proceso de transición, un requisito que, según Reuters, recordó al modelo adoptado en Nicaragua en 1991, cuando el sandinismo mantuvo influencia militar pese al cambio de gobierno. Para la administración Trump, esa condición era totalmente inaceptable.
El diario Miami Herald, citado por Reuters, confirmó que la llamada tuvo como objetivo comunicarle a Maduro, sin rodeos, que aún tenía una salida diplomática si renunciaba voluntariamente y abandonaba el país. La oferta incluía garantías para él, su esposa Cilia Flores y su hijo, pero solo si aceptaba salir del poder sin condiciones y de manera inmediata.
Una persona presente en la conversación aseguró al periódico estadounidense que la comunicación se estancó en tres asuntos fundamentales: la exigencia de una amnistía total, la intención del chavismo de mantener control sobre las fuerzas armadas y el desacuerdo sobre el momento de la renuncia. Washington exigía que fuera inmediata, mientras Caracas buscaba aplazarla.
Trump reconoció públicamente que sostuvo la conversación con Maduro, aunque se negó a calificarla. “No puedo decir si fue una buena o mala llamada, fue solo una llamada”, afirmó el fin de semana.
Tal como concluye Reuters, la presión sobre el régimen venezolano se intensifica y las opciones de Maduro para negociar una salida se reducen drásticamente.
