La segunda instancia encontró responsable al hermano del expresidente Álvaro Uribe por homicidio y concierto para delinquir en el caso de los ‘12 Apóstoles’. La defensa anunció que apelará.
Este martes se conoció la decisión del Tribunal Superior de Antioquia, que revocó la absolución emitida en noviembre de 2024 y condenó a Santiago Uribe Vélez, hermano del expresidente Álvaro Uribe, a 340 meses de prisión —más de 28 años— por los delitos de homicidio agravado y concierto para delinquir agravado en el caso de los llamados ‘12 Apóstoles’, organización paramilitar señalada de múltiples crímenes en el norte de Antioquia.
La decisión de segunda instancia, tomada tras la apelación presentada por la Fiscalía, consideró demostrado que Uribe participó en la conformación y dirección del grupo criminal y lo responsabilizó por hechos ocurridos hace más de dos décadas, entre ellos el homicidio del conductor Camilo Barrientos, señalado por ese grupo de ser presunto colaborador de la guerrilla.
El fallo sostiene que la prueba recolectada “alcanzó el estándar de certeza racional” sobre su responsabilidad penal y contradijo por completo la decisión de primera instancia que lo había declarado inocente. Incluso, el Tribunal dio por acreditado que la hacienda La Carolina fue utilizada como sede de reuniones, entrenamientos y actividades del grupo, elementos que calificó como constitutivos de delitos de lesa humanidad.
El testimonio del entonces comandante de la Policía de Yarumal, Juan Carlos Meneses, fue determinante en la decisión. Según el Tribunal, Uribe informó al oficial que Barrientos estaba en una lista de personas que serían asesinadas por presuntamente auxiliar a la guerrilla, versión que se incorporó en la sentencia de más de 300 páginas. El fallo también descartó la tesis de la defensa que atribuía la muerte del conductor a un enfrentamiento con un patrullero.
Aunque la condena se profirió en segunda instancia, el proceso continúa. El Tribunal precisó que Santiago Uribe puede ejercer la “impugnación especial”, al tratarse de su primera condena en segunda instancia, mientras que las demás partes podrán acudir al recurso extraordinario de casación.
El abogado Víctor Mosquera, miembro del equipo defensor, afirmó que “la condena no está en firme y debe prevalecer la presunción de inocencia”, y anunció que revisarán la sentencia bajo los estándares del derecho internacional.
