Durante su intervención en la Cumbre de la Celac, celebrada en Santa Marta, el presidente Gustavo Petro sorprendió al país al revelar una conversación privada que sostuvo con el expresidente Álvaro Uribe Vélez, a quien le propuso acudir juntos ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
El jefe de Estado aseguró que su invitación buscaba promover la verdad y la reconciliación nacional, más allá de las profundas diferencias políticas que históricamente han dividido a ambos líderes.
“Y no hablo con el odio —dijo Petro—. Se lo manifesté personalmente: hermano, vamos a la JEP ambos, es la verdad lo que hay que priorizar. No me interesa que lo juzguen afuera, me interesa cuidarlo, a sus hijos y a sus bienes”, expresó el mandatario en su discurso.
Petro agregó que su planteamiento no busca venganza sino un proceso de perdón social. “Me interesa que haya un acto de reconciliación, el perdón social que defendí en campaña. Lo tergiversaron, lo convirtieron en un supuesto pacto con el narcotráfico, cuando en realidad se trataba de evitar que desde las cárceles se siguiera ordenando violencia en las comunidades”, explicó.
El presidente también aprovechó su intervención para cuestionar lo que calificó como una falta de reciprocidad hacia los gestos de apertura y diálogo de su gobierno. “La respuesta que le han dado a nuestra generosidad, a la decencia, al intento de razonar en sociedad, no ha sido justa”, señaló.
Cabe recordar que meses atrás surgió un debate público luego de que exintegrantes de las antiguas Farc-EP propusieran que el expresidente Uribe también se presentara ante la JEP, en el marco del proceso de verdad y reparación que impulsa la justicia transicional.
