La excongresista Aída Merlano Rebolledo fue condenada a 3 años y 5 meses de prisión (42 meses) por el delito de fuga de presos, en relación con su mediática evasión ocurrida el 1 de octubre de 2019.
La sentencia fue emitida por la Juez 18 Penal del Circuito con Función de Conocimiento de Bogotá, quien avaló el preacuerdo que Merlano había suscrito previamente con la Fiscalía General de la Nación. Merlano reconoció su responsabilidad en el delito en septiembre de 2024.
El 1 de octubre de 2019, mientras se encontraba en una cita odontológica en el norte de Bogotá, la entonces senadora protagonizó una fuga que capturó la atención nacional. Merlano se descolgó con una soga desde la ventana del consultorio, cayendo a un primer piso donde un cómplice, disfrazado de domiciliario, la esperaba para huir en motocicleta.
En la audiencia de presentación del preacuerdo el 7 de noviembre, Merlano reapareció visiblemente afectada desde una guarnición militar en Malambo (Atlántico). En su declaración, expresó arrepentimiento, no por haberse fugado, sino por los delitos originales que la llevaron a prisión.
«Yo estoy muy arrepentida, no de haberme fugado, me arrepiento de haber cometido los delitos que me llevaron a estar privada de la libertad por primera vez», afirmó la excongresista.
Merlano, quien lleva siete años privada de la libertad (incluyendo tres años bajo «condiciones deplorables» en Venezuela), también hizo un llamado a que cesen las «sevicias» en su caso.